(5) Mi nudo en la garganta.....

Me acuerdo cuando vino el curita a darle la última extremaunción, ( porque fueron varias); Le abro la puerta de calle, lo llevo al dormitorio donde estaba mi papá y me sugiere que me quede ahí....acompañándolos y repetí algunos rezos parada a los pies de la cama....Cuando el “enviado de Dios” se fue, mi papá- que ya no se podía levantar de su cama- me miró...nunca olvidaré esos ojos, esa expresión..... como pidiendo una explicación para esta situación y estalló en llanto. Estábamos solo los dos, yo tenía un nudo enorme en la garganta....quería ser fuerte, estar entera...pero un instinto me hizo recostarme encima suyo, y lloramos ....los dos.....(algo insólito por la relación que él acostumbró tener con nosotros, sus hijos, más bien lejano) PAPA!! –le decía metida entre su cogote y la almohada- cómo poder ayudarte, aunque sea un poquito!!! Qué puedo hacer para compartir todos tus dolores y así alivianarte aunque sea un poco.... daría cualquier cosa por sacarte la mitad de tus problemas y metérmelos bien dentro de mi!!!!! Ese diálogo terminó abruptamente.....yo no podía desmoronarme.....tenía que ser la fuerte, al fin y al cabo, él era el enfermo y yo tenía que continuar siendo el personaje que la vida me había impuesto, un personaje de algo parecido a la piedra......si, algo como la piedra, muy duro para que contenga todo lo de adentro que está deshecho, para que soporte todos los golpes que desde afuera vienen....y que vendrán luego.....luego vendrá otro golpe...

Regalito:.... El hombre no es grande.......llega a serlo...